“Decir ‘tengo cáncer’ no es tabú, cuanto más hablemos del tema, más mujeres van a tomar conciencia”

Octubre ha sido declarado por ley provincial como el mes para la sensibilización sobre el cáncer de mama, conocido como “Mes Rosa”. El objetivo aumentar la atención, el apoyo y la detección precoz de la enfermedad. Los testimonios de las mujeres que pasaron por el proceso de tratamiento son indispensables para animar a otras a hacerse chequeos.

Florencia Folmer tiene 32 años y actualmente está transitando el proceso de tratamiento contra el cáncer de mama. “Esto arranca en el 2021, cuando en julio de ese año, me tocaban los controles anuales, los cuales yo siempre respeté mucho”, comenta, y continúa “venía haciendo un seguimiento ya que en la mama derecha tenía un nódulo que debido al carácter fibroso de la mama, lo controlaba desde hace años, pero nunca cambiaba su tamaño”. Cómo el autoexamen con las manos era un hábito en su vida, en un momento explica que sintió algo distinto en la mama izquierda, pensó que era un nuevo nódulo, a lo mejor nada grave, como lo del lado derecho. 

Es así como decide ir a su control anual para sacarse las dudas. “El nódulo de siempre (el derecho) estaba igual, pero le comento a la doctora sobre lo que estaba sintiendo en la otra mama”, explica, y continúa, “no encuentra nada raro en las imágenes, pero aún así me deriva a la parte de mamografía, ya que es más preciso que una ecografía normal”.

Florencia comenta que se asustó un poco, ya que solo fue a realizarse el control de rutina, pero siempre recurrió a sacarse las dudas para quedarse tranquila. Luego de la mamografía, vinieron otros estudios. El tiempo transcurre hasta el mes de diciembre de ese año, cuando en la resonancia magnética realizada, se visualiza un tejido que había que estudiarlo. “A partir de ahí, se me envía a una interconsulta con un mastólogo, lo cual deriva a una biopsia”, explica, y comenta que de ese estudio, le informan que lo que siente, se trata de un carcinoma intratubular, el cual es maligno.

Entre estudios y preparaciones, el tiempo transcurre hasta llegar a marzo del año 2022, “entre turnos y turnos, el tiempo pasa bastante rápido”, explica. Una vez analizada la situación, es derivada a oncología, sumado a un equipo preparado para acompañar el tratamiento venidero, entre los que se cuentan una nutricionista, terapia, kinesiología (para el tratamiento post cirugía) .

“El tratamiento finalmente lo comencé en abril de este año, no sin antes consultar otras opiniones, ya que tenía la cabeza llena de miedos y dudas, pero todo el equipo que forma parte del tratamiento y post-tratamiento te contienen mucho, son gente que te tranquiliza a todo momento”, comenta Florencia.

El tratamiento se realizó hasta el pasado mes de septiembre y hasta el momento está en espera de revisión para corroborar los resultados obtenidos en estos últimos tiempos. “Mi etapa actual es esta, estoy esperando a ver si hay que realizar la cirugía para quitar el tejido dañado, y de acuerdo a los resultados, se va a saber si hay que hacer radioterapia o no”, comenta.

Una de las cosas que la ayudó bastante, es seguir perfiles de Instagram sobre el tema como la cuenta “Hilo Rosa”, administrada por chicas que atravesaron el proceso de tratamiento del cáncer de mama y tiran tips y datos para ayudar a otras mujeres. “Decir “tengo cáncer” no es tabú, cuanto más hablemos del tema, más mujeres van a tomar conciencia y hacerse chequeos anuales, explica, y continúa, “como recomendación, pienso que nadie se conoce mejor que una misma, así que si sentís algo que te llama la atención, preguntá, insistí, ya que hoy en día se cuentan con muchos estudios, y el tiempo es fundamental”.

“Una de las cosas más importantes es la contención que te brindan tanto el equipo encargado como tus cercanos, recibí mucha de parte de mi familia, amigos y del equipo de médicos. Claro que el mundo se te viene abajo, pero hay que proponerse avanzar, tener paciencia, empuje, y energía positiva siempre, la actitud es fundamental en este proceso, más allá de que van a haber días malos”, finaliza. 

La detección temprana es muy importante

El cáncer de mama es una patología que afecta mayoritariamente a mujeres que están por encima de los 50 años, aunque claramente puede aparecer antes. Según especialistas, el 6% de los casos se diagnostican antes de los 40 años. Es a su vez el cáncer de mayor incidencia en mujeres, con una tasa de 71 casos por cada 100.000 mujeres.

Se recomienda realizar un primer chequeo mamográfico a los 35 años, y anualmente a partir de los 40, aunque al contar con casos hereditarios (madre o familiares que lo hayan tenido) los chequeos se deben hacer en edades más tempranas, aunque el factor hereditario representa sólo alrededor del 5-10%  en los casos de este tipo de cáncer.

Un dato importante es que un estudio ecográfico permite la detección de un cáncer mamario hasta dos años antes de ser palpable, en cambio, una mamografía, puede detectar hasta 3 años antes de esto.

En Argentina, este tipo de cáncer afecta a alrededor de 8 a 10 mujeres a lo largo de su vida, y anualmente en el país se producen 19 mil nuevos casos, perdiéndose alrededor de 5.600 vidas a causa del flagelo.

La detección temprana es muy importante, ya que cuanto antes se halle, más probabilidades de éxito tendrá la curación. En la mayoría de los casos, al consultorio llegan las mujeres que se palparon un nódulo o notaron que se produjo un cambio en sus mamas.

Es de gran importancia dar visibilidad a los testimonios de mujeres que han pasado por el proceso de tratamiento, o lo hayan finalizado, con el fin de animar a más personas a animarse a ir al médico, a realizarse chequeos, a tener en cuenta la importancia de un autoanálisis con el fin de, cuanto antes, sacarse dudas, y evitar mayores problemas a futuro.