
El científico Gabriel Rabinovich donó un citómetro de flujo a la UNaM para el desarrollo de biomedicina avanzada
Se trata de una herramienta educativa fundamental para enseñar el análisis celular avanzado y técnicas modernas de laboratorio. El reconocido científico será entrevistado desde las 21, en el programa “El Periodista” por Canal Doce.
La Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM) celebra el 40° aniversario de la carrera de Farmacia, con un gesto trascendental para su comunidad académica. El reconocido científico Dr. Gabriel Rabinovich anunció la donación de un importante equipamiento de investigación destinado a fortalecer la formación y el desarrollo científico en la provincia.
El anuncio se realizó en una conferencia de prensa que el investigador compartió junto al decano Dardo Marti. Allí, Rabinovich recordó su vínculo con la provincia. Explicó que, aunque realizó su carrera en Córdoba, “la mitad de su corazón está acá” porque encontró “gente espectacular, con ganas de crecer y generar cosas nuevas, un talento fantástico”. También remarcó: “Cuando estuve aquí, el año pasado, dije que iba a volver para seguir apoyando y colaborando”.
Qué es un citómetro de flujo
El equipo que donó Rabinovich es un citómetro de flujo que será instalado en el laboratorio nuevo del Módulo de Bioquímica y Farmacia de la FCEQyN. Estará destinado a la investigación y servicios para la comunidad.

© Marcos Otaño
El citómetro de flujo es una herramienta fundamental en biomedicina y ciencias de la vida que permite analizar múltiples características de células y partículas en suspensión de manera rápida y precisa.
En medicina, sus usos más destacados incluyen:
- Inmunofenotipificación para diagnosticar y clasificar leucemias, linfomas y otras enfermedades hematológicas.
- Evaluación del sistema inmune
- Monitoreo de terapias oncológicas
- Diagnóstico y seguimiento de inmunodeficiencias, incluido el VIH.
En microbiología, se utiliza para la detección y análisis de microorganismos y su sensibilidad a tratamientos.
Mientras que en investigación farmacéutica, se utiliza para analizar con alta precisión características celulares y moleculares esenciales en el desarrollo y evaluación de nuevos medicamentos.

© Marcos Otaño
En la carrera de Farmacia, el citómetro de flujo puede utilizarse como una herramienta educativa fundamental para enseñar el análisis celular avanzado y técnicas modernas de laboratorio.
Se puede incluir en la formación en las siguientes áreas:
- Farmacología experimental: para estudiar el efecto de drogas en células específicas y analizar respuestas celulares y moleculares.
- Toxicología: para evaluar la citotoxicidad y mecanismos de daño celular inducidos por fármacos o sustancias químicas.
- Biología celular y molecular: para profundizar en la caracterización de células y subtipos celulares, así como en la regulación del ciclo celular y apoptosis.
- Inmunología: para identificar y cuantificar poblaciones de células inmunitarias y su interacción con medicamentos o compuestos terapéuticos.
- Desarrollo de fármacos: para la validación preclínica de nuevas moléculas y la identificación de dianas terapéuticas mediante análisis multiparamétricos.
Rabinovich: “Vamos a colaborar científicamente”
Respecto a la donación, Rabinovich detalló que “se firmó un convenio, tiene que ver con el Parque de la Salud pero también con la Facultad de Exactas de la Universidad de Misiones”. Agregó: “Vamos a colaborar científicamente, en principio lo que hicimos fue el traslado de un equipo que fue muy importante en los últimos años para nosotros y va ser importante aquí, tanto para la parte educativa como salud”.
Durante su exposición, destacó el rol integrador de la ciencia. Aseguró que “la ciencia une ideologías, políticas, une a la gente y ese es nuestro objetivo, es lo que quisimos hacer toda la vida con nuestro proyecto de investigación”.

Misiones, a la vanguardia de la salud pública
Asimismo, mencionó la incorporación del equipo PET/ETC al Instituto Misionero del Cáncer como un avance fundamental para detectar y tratar tumores. Recordó que “una de las cosas que más me emocionó conocer cuando estuve aquí la última vez fue conocer el Instituto del Cáncer y también el hospital”. Sobre las instalaciones señaló: “No tienen nada que envidiarle a muchísimos hospitales que conozco en el mundo”. Con humor, añadió: “Encima cuando vine, incorporaron el PET, así que cartón lleno”.
Rabinovich también resaltó las ventajas del nuevo equipamiento: “Tienen la posibilidad de diagnosticar, de tratar, de ver el pronóstico de pacientes con cáncer y generar mejores tratamientos personalizados”.
Finalmente, subrayó la proyección de la provincia en el ámbito científico y sanitario. “Se trata de una provincia que está subiendo cada vez más y más alto, es un ejemplo para el país”, concluyó.
© Foto de portada: Marcos Otaño