Desmonte ilegal en Yasý: “Hubo violencia y abuso de poder”, aseguró Manuel Goncalves

Este jueves, se denunció públicamente un conflicto por la disputa de tierras de propiedad privada que involucró al emprendimiento eco turístico de Martires, el camping «Yasý, Selva & Agua» donde habitualmente visitan los apasionados del kayak.

El pasado jueves, se vivieron momentos de tensión durante un intento de desmonte ilegal en la Reserva Yasý y quien se adjudica ser propietario, Manuel Goncalves, informó que “hubo una violación y atropellamiento a la reserva natural que incluyó tala ilegal de árboles, destrucción de instalaciones del camping e incluso el robo de una computadora personal”.

La denuncia formal fue realizada en Oberá por Goncalves, un joven emprendedor a cargo del camping, nieto de Don Jorge Goncalves, propietario del lugar que históricamente fue una reserva familiar y en la actualidad se desarrollan actividades ecoturisticas de baja intensidad, conocida en la zona como “Yasý, Selva & Agua»

Según explica Manuel, desde los años 60´ su abuelo se asentó en la zona adquiriendo un predio de más de 100 hectáreas en las que está emplazado el emprendimiento cultural y turístico Yasý.

Oportunamente, en ese predio junto al arroyo se desarrollaron actividades sociales y de camping para la comunidad local, ya que al frente y sobre la Ruta funcionaban la Estación de Servicios YPF y el Almacén de Ramos Generales; ambos espacios de parada casi obligada para quienes viajaban de Posadas a Oberá y también propiedad de la familia Goncalves.

“Durante los últimos 35 años en el camping donde se crió toda la generación de nietos de Don Jorge, siendo un espacio de uso exclusivamente familiar y de amigos, se mantuvo el monte natural como se encontraba, con infraestructura de mínimo impacto para la naturaleza y haciendo frente a cada crecida del arroyo”, indicó el actual propietario.

Conflicto judicial por las tierras
“Por el momento se espera una pronta resolución del conflicto que pone en riesgo mi integridad física al frente del emprendimiento cultural y turístico, así como también de mi familia y allegados”, expuso en un comunicado de prensa Manuel Goncalves, tras el escandaloso episodio vivido esta semana en Martires.

Fue el jueves 23 de febrero, según el relato del propietario, desde las 6:30 AM varios vehículos se encontraban estacionados a la vera de la ruta mirando hacia el balneario y una excavadora avanzaba abriendo camino en el lote privado.

“Los hombres iniciaron un desmonte ilegal en el Lote 86, con claras intenciones de abrir camino hacia el camping emplazado en el LOTE 87 C y 87 D y LOTE 86. Se dio aviso a la Policía local, y se frenó parcialmente el desmonte pero, luego se reactivó extendiéndose unos 150 metros a la vera de la ruta y continuando su trazado hacia el camping perpendicular a la ruta, unos 100 metros más”, detalló Goncalves.

Finalmente, se hizo presente la patrulla del Ministerio de Ecología, que procedió a ordenar la detención del desmonte y a corroborar la tala de las especies tumbadas en el ingreso al camping.

“Entre las personas al frente del atropellamiento, intrusión a la propiedad privada, robos y destrozos se encontraban Nora Arnold como la responsable de ordenar el ingreso y su actual pareja, el ex fiscal general Rubén González Glaría”, mencionó el denunciante.

Además, señaló a “Fabiana Arnold y el Sargento Ayudante Raúl Valles; quien según varios testigos que se encontraban en el lugar fue el encargado de tumbar decenas de árboles con motosierra y quien ultrajó los kayaks, así como también robó la computadora”.

Las personas mencionadas ya eran conocidas por el propietario de Yasý y allegados, por situaciones de amenazas padecidas con anterioridad.

También denunció Goncalves la intervención de un hombre conocido como “Patán” Albarrasín, quién lideraba el grupo de hombres que irrumpieron en la propiedad privada a la vera de la ruta y realizaron amenazas verbales.

Todos estos nombres constarían en la denuncia realizada, ya que fue registrada la situación de violencia y atropellamiento generada en múltiples videos y fotos que luego se viralizaron en redes sociales, así como también en las redes de Alem News, un medio de comunicación de la localidad de Leandro N. Alem que acudió al lugar alertados por los vecinos asustados por el nivel de violencia que se vivió.

Goncalves relató en un escrito que ya se habían vivido situaciones de violencia en otras oportunidades. “Otro atropellamiento se generó el pasado 20 de diciembre cuando las mismas personas mencionadas anteriormente ingresaron abruptamente a la propiedad de Yasý, echando a los acampantes que pasaban el día en el lugar. De ese hecho incluso hubo una denuncia que fue rechazada en la Policía local”, afirmó.

En aquella oportunidad, no sólo se alertaba sobre la usurpación sino también sobre violencia verbal y física hacia una mujer allegada de la organización que intentó impedir el atropellamiento.

Tras varios días de permanecer usurpando el espacio, los intrusos se retiraron del lugar el día 23 de diciembre.

Dicha situación de “atropellamiento fue posterior a una audiencia convocada por la Subsecretaría de Tierras del Ministerio de Ecología de la provincia, en la cual participaron las dos partes y se acordó que se realice una nueva inspección del lugar, así como también se otorgue nulidad a la documentación fraudulenta presentada por Nora Arnold”, concluyó el denunciante en su comunicado oficial. (Misiones Online)