Bitcoin se recuperó después de dos malos años y varios países empezaron a regular este mercado.
Después de un año difícil en 2022, con la pérdida de valor de varias criptomonedas y problemas legales de empresas del sector, la segunda parte de 2023 representó un alza en el mercado, especialmente en monedas como el Bitcoin y Ethereum, que son las dos más fuertes actualmente.
Durante este año, esta industria encontró en las stablecoins o criptomonedas estables la oportunidad de mantener la confianza de los usuarios, mientras la industria está en un proceso de regulación y depuración que le permita tener solidez para recuperar estabilidad.
Cómo fue el 2023 para las criptomonedas
Este año se puede definir en dos partes. Por un lado, el mercado encontró en las stablecoins una solución para tener activos en monedas que no eran las de su país y hacer transacciones sin perder valor. Y por el otro, la reglamentación y organización de la industria tras los problemas legales de algunas empresas.
Respecto al mercado de esta industria basada en la tecnología, Alejandro Beltran, country manager de Buda para Colombia, indicó al portal Infobae, que este año fue “bastante positivo porque bitcoin tuvo una valorización cercana al 160% con una recuperación muy fuerte después de dos años complicados”, especialmente en 2022.
Sin duda las stablecoins fueron grandes protagonistas. Estas son monedas que están indexadas a dinero de curso legal, como el dólar, en el que tener un token de esta cripto representa tener un dólar, por ejemplo. Algo que brinda estabilidad y le permite a los usuarios tener activos en monedas que no son las locales y hacer transacciones.
“Las stablecoins se convirtieron en nuevas opciones emergentes que permiten a las personas resguardarse en situaciones de inflación. Lo que sucedió en Venezuela, esto le permitió a la gente crear transacciones con una moneda que tiene una recordación muy fuerte, como es el dólar americano, pero de manera digital y sin pensar en la conversión al Bitcoin”, afirmó Beltrán.
Dentro de los sectores más beneficiados por este tipo de moneda están los desarrolladores de software y aquellas personas que trabajan como freelance, quienes recibieron sus pagos en stablecoins sin tener que usar la metodología tradicional yendo a una casa de cambio y perder dinero en el proceso, ya que la transacción digital minimiza esa perdida.
El otro panorama de 2023 fue el de la industria. “Producto de lo que pasó en 2022 con la debacle de FTX, muchas de estas empresas que tenían una conexión comenzaron a generar un riesgo sistémico y la industria comenzó a depurarse”, contó Alejandro Beltrán.
Esta situación empezó a ejercer presión para la creación de marcos normativos y regulatorios, además de generar cierres de empresas del sector.
“Hubo una limpieza y se empezó a medir quienes estaban generando buenas prácticas. Además, los volúmenes de transacciones comenzaron a descender y efectivamente la usabilidad comenzó a afectar a muchos financieramente. Por lo que básicamente la estrategia del 2023 fue la supervivencia”, aseguró el experto.
Qué se viene para 2024
El próximo año tiene dos panoramas: la regulación y el movimiento de Bitcoin. La presión por el marco normativo de 2023 continuará en 2024 con el objetivo de establecer todos los proyectos que se están desarrollando en diferentes países.
Beltrán lo define como “el año en donde los principales gobiernos, los centros de supervisión, van a comenzar a adoptar medidas normativas para regular la industria”.
Pero también, a nivel tecnológico, ocurrirá un fenómeno que afectará el precio de Bitcoin y se llama halving, que es un proceso automatizado de reducción a la mitad de los bitcoins que reciben los mineros como recompensa por la creación de un bloque y esto sucede cada cuatro años.
“Se espera que esto ocurra entre abril y julio del próximo año. Esa reducción hace que las expectativas del precio suba, algo que ya pasó en los anteriores halving en 2020, 2016 y 2012 donde en el pre y el post halving se presenta una subida o una valorización del bitcoin muy fuerte”, concluyó Beltrán.
Fuente: Forbes