Cómo es el penal donde están detenidos los hermanos Kiczka
Provinciales02 de septiembre de 2024Redaccion RMMLa Unidad Penal VIII, con una extensión de 5800 metros cuadrados, está clasificada como un establecimiento de mayor seguridad que la comisaría donde estaban. El juez a cargo de la causa, Miguel Ángel Faría, decidió que los hermanos Kiczka -ambos imputados por distribución de material de explotación sexual infantil- sean trasladados allí y permanezcan en celdas separadas.
El domingo 1° de septiembre, el diputado puertista Germán Kiczka y su hermano Sebastián fueron trasladados a la Unidad Penal VIII, ubicada en Colonia Arroyo, Cerro Azul. Esto se produjo por decisión del juez Miguel Ángel Faría, quien ordenó el traslado desde la Comisaría 2ª de Apóstoles, donde quedaron detenidos inicialmente. La medida responde a razones de seguridad relacionadas con la naturaleza de las acusaciones contra ellos.
Establecimiento de mediana seguridad.
La Unidad Penal VIII, con una extensión de 5.800 metros cuadrados, está clasificada como un establecimiento de mediana seguridad. Este penal alberga a imputados en primera instancia, así como a condenados y procesados mayores de edad. La infraestructura del establecimiento incluye dos módulos de alojamiento denominados “A” y “Ex fuerza”. En términos operativos, cuenta con personal de traslado, bomberos y el Grupo de Intervención Especial Policial (G.I.E.P.).
Durante la noche del domingo 1° de septiembre, los hermanos fueron trasladados desde Apóstoles a la Unidad Penal VIII de Cerro Azul.
Allí también se realizan actividades productivas y educativas. Existen talleres de panadería, carpintería, herrería y electricidad, que son operados exclusivamente por el personal penitenciario. Además, la Escuela ECE N° 1 funciona dentro de las instalaciones del penal para ofrecer oportunidades educativas a los internos.
Los hermanos Kiczka permanecen en celdas separadas.
Dado el carácter del caso que involucra a los hermanos Kiczka, quienes fueron imputados por tenencia y distribución de material de explotación sexual infantil, el juez Faría decidió que permanecieran en celdas separadas dentro de la Unidad Penal VIII. Este establecimiento fue elegido en función de su capacidad para proporcionar un nivel adecuado de seguridad para los detenidos.
La Dirección General de Seguridad de la Jefatura de Policía evaluó el recinto y consideró que, dada la magnitud del caso y las circunstancias de las acusaciones, el traslado a un penal destinado específicamente para la custodia de detenidos era la medida más apropiada.
Tras la orden, efectivos de la fuerza procedieron al correspondiente traslado cerca de las 21 horas del domingo 1° de septiembre.