Gerardo Werthein cuestionó la vigencia del Mercosur y sus reglas. Hay expectativas sobre las negociaciones futuras, todos los países del Mercosur.
Con divergencias en tono y entusiasmo, pero también con expectativas sobre las negociaciones futuras, todos los países del Mercosur avalaron este viernes el acuerdo de libre comercio con la Unión Europea. Argentina y Paraguay señalaron en la reunión previa de cancilleres algunos aspectos que no satisfacen completamente a sus delegaciones.
“Todos los países se expresaron a favor del acuerdo al que se llegó con la Unión Europea y mañana se terminará de confirmar con la presencia de los líderes”, anunció el canciller Omar Paganini este mediodía en la sede del Mercosur.
Consultado sobre la negativa del gobierno francés a la posibilidad de este acuerdo, Paganini aclaró que “los mecanismos de aprobación de la Unión Europea aparentemente le impiden al gobierno francés, desde un punto de vista formal, bloquear este acuerdo, por lo que estamos esperanzados”.
“La presencia en el Uruguay de Ursula von der Leyen mostró el éxito de un proceso de negociación y el apoyo a la etapa final de negociación”, concluyó el canciller.
Disidencias en torno al acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea
Durante la reunión del Consejo de Mercado Común celebrada en la mañana, Paraguay consideró que los alcances del acuerdo fueron insuficientes. El canciller argentino Gerardo Werthein enfatizó algunos matices que su gobierno mantuvo sobre el acuerdo a cerrarse mañana y reclamó una flexibilización efectiva del bloque.
“Argentina tuvo toda la intención de que a los miembros de este bloque les fuera bien. Sabíamos la importancia que tuvo el acuerdo de la Unión Europea con el Mercosur para Brasil y para el resto de los países. Para nosotros este acuerdo no fue sujeto interdeterminante, pero Argentina privilegió el interés de todos los socios y, a pesar de que contuvo ciertas cuestiones que quizás no estuvieron dentro de nuestras competencias, consideramos que, en el interés de privilegiar a nuestros socios y a nuestros países hermanos, Argentina lo apoyó”, expresó.
El diplomático argentino fue más allá y consideró que “las reglas del Mercosur quedaron antiguas”. En esa línea, propuso un período de cuatro meses para que los países integrantes del bloque discutieran lo que consideró una “necesaria y prioritaria” flexibilización que superara el actual formato de negociaciones 4 más 1.
“La actualización profunda de las reglas actuales del Mercosur evitó también que, cuando celebramos acuerdos 4.1, tardáramos 23 años en llevarlos adelante”, expresó con claridad el canciller.
Con información de Ámbito.