Agosto rompe récords de heladas en Misiones: análisis del INTA sobre el impacto en cultivos

El agrometeorólogo del INTA, José Olinuc, analizó el reciente fenómeno de bajas temperaturas y heladas en Cerro Azul, Misiones, y su impacto sobre la producción agrícola. Según Olinuc, este agosto registró un número récord de heladas, con ocho episodios, superando todas las marcas históricas para la región; también recomendó algunas prácticas para evitar daños en la producción agrícola.

Olinuc destacó que, aunque las heladas registradas durante el mes de agosto fueron más frecuentes de lo habitual, la intensidad de estas no ha sido extrema. «Hasta ahora, las heladas están dentro de los valores normales y no han ocasionado daños serios a los cultivos», manifestó. Sin embargo, la helada del día de ayer fue la más intensa del mes, alcanzando los -2,3°C.

El experto del INTA aclaró que, históricamente, el récord de intensidad para agosto se produjo en 1991, con una temperatura de -5,8°C. «Este agosto ha sido muy variable, con un total de ocho heladas, lo cual nunca habíamos registrado antes. El promedio no llega a dos heladas por mes en esta época del año», añadió.

En cuanto al impacto de estas heladas sobre la producción, el agrometeorólogo  explicó que los daños han sido mínimos debido a la etapa temprana de floración de las plantas. «Los cultivos más sensibles, como las pasturas, han sufrido algunos daños, especialmente en áreas bajas. Sin embargo, estos daños son menores por la época del año en que se produjeron», señaló.

El té, un cultivo significativo en la región, podría verse más afectado si las heladas se producen en septiembre, cuando está en plena brotación. «Hasta ahora, los daños han sido escasos, pero si las heladas continúan en septiembre, podríamos perder la primera cosecha de té», alertó.

El uncionario del INTA también abordó las técnicas de manejo para mitigar los efectos de las heladas. Recomendó prácticas de prevención como no sembrar maíz o mandioca muy temprano y mantener una cobertura en las plantas de yerba mate para protegerlas. «En los sistemas silvopastoriles, los árboles ayudan a proteger las pasturas de las heladas», explicó.

Además, destacó que el suelo en Cerro Azul mantiene un nivel de humedad adecuado gracias a las lluvias por encima del promedio. «Esto es positivo, ya que se preveían menores precipitaciones, pero hemos tenido varios milímetros por encima, lo cual es favorable para la producción», concluyó.