Fábrica de calzados de Puerto Rico produce seis mil pares por mes con materia prima propia y los exporta a ocho provincias

En ese sentido, recordó que “cace 40 años mi padre empezó con esto. Luego seguimos los hijos y ahora se involucraron los nietos. Estamos con artículos de seguridad industrial, siempre bien equipados; somos una empresa de vanguardia a nivel nacional. Los que nos inspeccionan nos dicen eso”.

 
Aclaró que su familia viene de la industria del cuero y tienen una curtiembre que les hace de soporte. Siempre apuntaron a elaborar un producto competitivo, pero se les hizo complicado por la falta de recursos y mano de obra calificada. “No queríamos fabricar algo de mala calidad, la idea era elaborar el mejor calzado del país y competir con las mejores marcas”, acentuó.

“Tenemos máquinas de Brasil e Italia, no tenemos apoyo de nadie, todo viene de una administración familiar ordenada y prolija. Si teníamos que comprar el cuero en Buenos Aires, nos íbamos a fundir y entonces entendimos que debíamos hacer todo el proceso comercial, desarrollamos cuero de gran calidad para imponerla en nuestro producto. Formosa, Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires son algunas de las provincias a las que abastecemos”, ponderó.

Luego, recalcó que la empresa está bien posicionada y con perspectiva de producir el doble de los seis pares mensuales que se fabrican en la actualidad, pero deciden no hacerlo para cuidar el personal “que siempre capacitamos y es el bien más preciado”.